martes, 26 de febrero de 2013

Asteroide del 15 de febrero de 2013


(Aprovechamiento de los recursos didácticos ocasionales)


La visita del cuerpo celeste más mediático de los últimos años ha quedado parcialmente eclipsada por la caída inesperada de un meteorito en Rusia que ha causado más de mil heridos, la mayoría de carácter leve. En principio, los astrónomos han descartado que este suceso tenga relación alguna con el asteroide 2012 DA14 que el viernes, a las 20.30 (hora peninsular española) se convirtió en el objeto celeste de mayor tamaño que más se ha aproximado a la Tierra sin llegar a colisionar desde que las agencias espaciales realizan tareas de vigilancia.

Así rozó el asteroide la Tierra:


Caída de un meteorito en Rusia:

Más de 900 personas han resultado heridas o contusionadas este viernes, entre ellas 159 niños, presuntamente por la rotura de cristales, al caer un meteorito en la región de Cheliábinsk, en los montes Urales, informó el Ministerio del Interior de Rusia y las autoridades de la citada región.
La mayoría sufrió heridas al romperse los cristales de su casa por el impacto. En total, se han registrado daños en al menos seis ciudades de esta región, situada a unos 1.500 kilómetros al este de Moscú.



Meteorito en 1908 en Siberia:

El evento de Tunguska fue una explosión aérea de muy alta potencia ocurrida sobre las proximidades del río Podkamennaya en Tunguska (Evenkía, Siberia, Rusia), en la posición 60°55′N 101°57′ECoordenadas: 60°55′N 101°57′E (mapa) a las 7:17 del día 30 de junio de 1908.
El fenómeno de Tunguska alentó más de 30 hipótesis y teorías de lo ocurrido. La detonación, similar a la de un arma termonuclear de elevada potencia, ha sido atribuida a un cometa. Debido a que no se ha recuperado ningún fragmento, se maneja la teoría de que fue un cometa formado por hielo. Al no alcanzar la superficie, no se produjo cráter o astroblema. Casi un siglo después se produciría no muy lejos el evento de Vitim, menos espectacular pero aún más extraño.



Tránsito de venus


Un tránsito de Venus es un evento astronómico que sucede cuando Venus pasa directamente entre el Sol y la Tierra; este hecho es análogo a los eclipses solares causados por la Luna, pero la distancia y el tamaño aparente de Venus hacen que este solo pueda verse como un pequeño punto negro que atraviesa la cara visible del Sol durante un tiempo de entre 5 y 8 horas.

Los tránsitos de Venus son uno de los eventos astronómicos predecibles más infrecuentes,1 pues a grandes rasgos ocurren según un patrón que se repite cada 243 años, con un par de tránsitos separados por 8 años entre sí y por más de un siglo del siguiente par. Esta periodicidad es consecuencia de que los períodos orbitales de la Tierra y Venus cumplen relaciones de conmesurabilidad de 8:13 y 243:395. En el siglo XXI tuvieron lugar tránsitos el 8 de junio 2004 y el 5-6 de junio de 2012, y los siguientes sucederán en 2117 y 2125.

Vimos un sol de madera teñida de naranja, con las marcas del paso de Venus hechas con incrustaciones de ébano fabricado por Jesús Albá.

Meteorito de Cangas de Onís

Asturias tiene también sus propios meteoritos. Contar su historia exige remontarse a la segunda mitad del siglo XIX, concretamente al 5 de agosto de 1856 y al 6 de diciembre de 1866, para hallar sus rastros. Del primero, el meteorito de Oviedo, se conservan dos fragmentos, uno en Madrid y otro en París, «aunque ambos son diferentes, por lo que no sabemos cuál es el verdadero», explica Luis Miguel Rodríguez Terente, doctor en Geología y director-conservador del Museo de la Facultad de Geología en Oviedo. Un fragmento del segundo, conocido como «el meteorito de Cangas (de Onís)», descansa en una de las mesas de exposición del museo de esta Facultad.

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